Envuelto en la bandera de la defensa democrática, Jorge Álvarez Maynez, coordinador nacional de Movimiento Ciudadano, usa un discurso falsario de fraude electoral, luego del fallo emitido por el tribunal electoral veracruzano al quitarle el triunfo de las elecciones en Poza Rica a emecé y entregárselo a la coalición Morena PVEM. El dirigente del partido fosfo-fosfo sabía lo complejo de la elección en ese municipio y el riesgo de perderlo era alto. Apostó a su suerte y no leyó las señales de la derrota lanzadas desde las filas de su partido.
Su objetivo era demostrarle a Dante Delgado que tenía el control electoral de la plaza y el “voto duro” en tierras veracruzanas era sólido. La realidad política lo rebasó. Su liderazgo quedó mal parado frente a su mentor político. Su capacidad convocatoria es mínima y su poder político limitado en uno de los supuestos bastiones del partido.
Semanas previas a la elección del 1 de junio, el partido de los “jingles pegajosos” dio señales de fractura que anunciaron resultados endebles. La muestra fue que, al menos, 16 candidatos emecistas en tierras jarochas se bajaron de la contienda. La renuncias de los emecistas fueron en: El Higo, Gutiérrez Zamora, Landero y Coss, Las Choapas, Manlio Fabio Altamirano, Minatitlán, Platón Sánchez y Tuxpan todas esas salidas del partido naranja no solo fueron por la creciente inseguridad. La realidad es que partido no tenía la misma fuerza de hace más de 20 años cuando surgió. En esta ocasión, los candidatos se movieron sin estructura ni respaldo del coordinador nacional. Esa fue la realidad de Álvarez Máynez. Además, Máynez no tiene la fuerza de Dante Delgado.
Otro síntoma de que el partido se encuentra alejado de la ciudadanía y militancia es que en las pasadas elecciones estatales, su candidato a la gubernatura, Hipólito Deschamps, obtuvo apenas el 6.7 % de la votación. Y en este momento, ya ni siquiera milita en emecé. Ahora, el tribunal le dio un revés que sacude su posición de coordinador.
La consolidación del partido es ficticia, Jorge Álvarez Máynez, coordinador emecista ve un partido de grandes dimensiones, aunque, es un partido de 390 mil 566 militantes. Tampoco es un partido con millones de empadronados. Apenas tiene el mínimo para mantener su registro y su fuerza en Veracruz ya pasó de moda.
En tanto, al sumar a la dirigencia estatal a Luis Carbonell de la Hoz, no abona al crecimiento del partido. Es la misma fórmula de reciclar personajes en una plaza sin objetivos claros y reutilizar el mensaje antiPRI. Ya sacó las uñas y apuesta a llegar al Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF). Desde este momento, su lectura es errónea. De llegar no se revertirá tan fácil la decisión estatal, la agenda de la magistrada Mónica Soto está de lado del poder. La lucha en el tribunal electoral es una causa perdida. Sobre todo cuando la posición de emecé es opuesta a los intereses de los integrantes del “círculo guinda” en el tribunal.