La Organización Mundial de la Salud publicó un documento en el que describe una nueva variante del SARS-CoV-2 causante de la pandemia de COVID-19. Mientras otras variantes como la LP.8.1 han disminuído, considera que BN.1.8.1. significa un riesgo adicional para la salud pública.
Aunque aclara que la enfermedad causada no es más grave, sí tiene un mayor índice de transmisión entre las personas sobre todo en la región de, Pacífico Occidental, América y Europa.
Si bien las cifras siguen siendo bajas, se trata de un aumento significativo en la prevalencia con respecto al 2,5 % registrado cuatro semanas antes, en la semana epidemiológica 14 de 2025 (del 31 de marzo al 6 de abril de 2025), Tabla 1. Entre las semanas epidemiológicas 14 y 17 de 2025, la prevalencia de NB.1.8.1 aumentó en las tres regiones de la OMS que comparten secuencias de SARSCoV-2 de forma consistente, es decir, un aumento del 8,9 % al 11,7 % para la región del Pacífico Occidental (WPR), del 1,6 % al 4,9 % para la Región de las Américas (AMR) y del 1,0 % al 6,0 % para la Región Europea (EUR).
El documento incluye un llamado a los Estados miembro a tomar medidas para la detección de esta variante, así como el estudio de anticuerpos para detectar cambios en los indicadores de gravedad. También es importante que la OMS anunció que la gestión de programas de prevención y control de enfermedades aplicadas para el COVID-19 caducaban el 30 de abril del 2025, pero tomando en cuenta el panorama actual la extenderán por un año más.
Para la OMS el crecimiento de esta variante es moderado, sin embargo, el riesgo que representa por ahora es bajo. Es importante resaltar que nuevamente los adultos mayores y personas inmunodeprimidas deben considerarse entre la población con mayor riesgo de contraer esta nueva variante.
Por ahora la OMS confía en que las vacunas actuales protejan a las personas de nuevos contagios y afirma que continúa un esfuerzo importante para encontrar fármacos eficaces en el combate de nuevas variantes y así estar preparados.
¿Cuáles son los síntomas de NB.1.8.1?
Así como el COVID-19 los síntomas incluyen dolor de garganta, problemas estómacales en diferentes intensidades, fatiga y dolor muscular.
Aunque inicialmente la cepa se detectó en Asia, sobre todo sitios turísticos como Egipto y Tailandia; los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) de Estados Unidos también han identificado casos en varios estados, como Nueva York, California, Arizona, Ohio, Washington y Rhode Island.