En un esfuerzo por fortalecer la protección ambiental y enfrentar de manera conjunta las amenazas sanitarias que afectan a los ecosistemas forestales, el Gobierno del Estado de México, a través de la Protectora de Bosques (Probosque), presentó un Protocolo de Sanidad Forestal en colaboración con autoridades de la Comisión Forestal del Estado de Michoacán (Cofom).
La estrategia contempla medidas coordinadas para la detección, contención y erradicación de plagas y enfermedades forestales, en una franja de cinco kilómetros que recorre la frontera entre ambas entidades, abarcando un total de 17 municipios y una superficie estimada de 105 mil 212 hectáreas.
Coordinación institucional para fortalecer la sanidad forestal
Durante la reunión interestatal, Alejandro Sánchez Vélez, Director de Probosque, señaló que:
“Con esta medida se establecerá un plan interestatal para emprender acciones y atender de forma eficaz los brotes de plagas y enfermedades en los bosques ubicados en los límites territoriales en ambas entidades”.
Entre las principales amenazas identificadas se encuentran insectos descortezadores y plantas parásitas, cuyo impacto ha sido significativo en los ecosistemas boscosos de ambas regiones.
Participación interinstitucional y enfoque integral
El protocolo prevé una colaboración activa entre instituciones de los tres órdenes de gobierno, tales como la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat), la Comisión Nacional Forestal (Conafor) y la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa). También participarán universidades, comités estatales y autoridades municipales.
Las responsabilidades de estas instancias incluirán la supervisión y ejecución de programas de sanidad forestal, asistencia técnica especializada, aplicación de medidas de control y restauración, y promoción del cumplimiento de la normatividad ambiental vigente.
Acciones inmediatas y monitoreo constante
Una vez detectado un brote, se emitirá una notificación inmediata al Comité Interestatal, activando el plan de respuesta para la verificación técnica y delimitación del área afectada.
Posteriormente, se implementarán las acciones de control conforme a la plaga o enfermedad detectada, incluyendo una evaluación de resultados y la elaboración de un informe técnico final.
Además, se contemplan medidas preventivas clave:
- Monitoreo sistemático de áreas vulnerables
- Instalación de trampas y vigilancia comunitaria
- Regulación del transporte de productos forestales
- Campañas de sensibilización dirigidas a comunidades rurales
Evaluación y seguimiento semestral
Para asegurar la eficacia del protocolo, se organizarán reuniones semestrales del Comité Interestatal, en las que se analizarán los informes de resultados y se ajustarán las estrategias según sea necesario.