Abierta y sinceramente por no decir cínicamente, Erik Catalán Rendón presidente municipal de Iguala, Guerrero explicó las razones de quitarle dinero a empleados del municipio. Los montos que van de los 1000, 2000 y 3000 pesos le son pedidos a cada empleado y según Catalán es para repartirlos entre quienes le ayudaron en su campaña y no pudo emplearlos como parte de su plantilla.
En el video que ya se difunde por redes sociales el alcalde explicó que no es posible dar empleo a todas las personas que lo apoyaron pues sólo son 80 plazas para repartir, por ello los que cuentan con un lugar en las oficinas municipales deben cooperar.
No sólo eso, Catalán narró que a quienes se quejan les ofrece intercambiar su puesto y recibir parte del dinero que “donan” los trabajadores. Vamos, confesó abiertamente una especie de extorsión.
Su razonamiento para realizar tal acción es que pensó en las prorrogativas o cuotas que él paga a su partido y por ello pensó en replicar el modelo al interior de su gobierno.
Replica de un modelo de extorsión municipal
No es sólo el caso de Catalán del que tenemos conocimiento, en otras ocasiones se ha denunciado a diferentes alcaldes de partidos diversos de pedir una “cuota” a los trabajadores para apoyar campañas políticas principalmente o para ayudar en algún siniestro, aunque hayan pasado años de la tragedia.
Ya sea de Morena como en el caso de Catalán, esta práctica de extorsión no es exclusiva de un partido político en concreto, ni siquiera una entidad, pues en varios estados se hace lo mismo.