Este viernes el presidente, Andrés Manuel López Obrador, retomó la polémica por su rechazo a usar tapabocas relacionándolo con uno de los principales males del país, la corrupción.
“Me voy a poner un tapabocas, saben cuándo, cuando no haya corrupción ya”, dijo en la conferencia matutina desde Palacio Nacional.
López Obrador dijo no saber si era verdad, pero recuperó una noticia de las últimas horas que indicaba que el Partido Acción Nacional (PAN) tramitaba un amparo ante el Poder Judicial para obligarlo a usar tapabocas.
“Entonces voy a dejar de hablar. Hagamos ese acuerdo, entonces vamos a apurarnos a acabar con la corrupción para que yo ya me ponga mi tapabocas, para que ya no hable”, dijo
El mandatario habló del uso de “cubrebocas” o “tapabocas” cuestionado sobre la polémica decisión de celebrar el tradicional Grito de la Independencia de México el 15 de septiembre.
Reiteró que el festejo tendrá lugar en el Zócalo capitalino, pero manteniendo sana distancia y, en esta gran plaza, se congregarán pocas personas y se encenderán antorchas para que no se apague “la llama de la esperanza”.